Raro entretenimiento (Libre)

Despues de tner que elegir un lugar dode vivir por un tiempo, no hay nada que hacer, las horas son aburridas y todo lo que se puede hacer es perder el tiempo en caminatas sin sentido, tranquilizantes, pero sin sentido. Despues de meditar por mucho tiempo tome una de las deciciones mas aburridas del mundo, pero igual la unica para matar el rato: entrar al instituto. Debido a mi fisico, talvez pasara desapercibida, pero por mi inteligencia nesesitaba saber un poco, o porlomenos repasar conocimientos mas que basicos, nada de primaria o algo asi, tal vez un grado de prepa estaria bien, aunque mi fisico no fuera con eso, pasaria el examen de ingreso con facilidad, los papeles tampoco serian problemas, asi que una vez arreglado todo, ahora solo faltaba asistir a las clases, tal vez conocer gente nueva y que me ayudara con mi aburrimiento y aunque se burlaran de mi lo dificil seria controlar la fuerza para no dañar a humanos que studiasen ahi, aunque si conociese vampiros o licantropos esperaba no fueran peligrosos o Vulturis, que era lo mismo a peligrosos para mi. Ahora solo quedaba ver que pasaba en mi lindo primer dia, esperaba tener mucha suerte y que todo marchara bien y fuese divertido y sin problemas.

La rutina precía cenizas en mi boca, el aire monótono de forks, estaba lleno de extraños perfumes, efluvios de humanos que como de costumbre admiraban mi belleza, capte mi reflejo en los lentes de un niño que llevaba anteojos, me encontraba muy bien ese día, me sentía con buen animo luego de ese pequeño chequeo, pero una suave brisa trajo consigo algo que hizo que me voltee imposible, pense. Las miradas de mi alrededor, se centraban en una chica nueva, que de humana no tenia nada. Se la veía sonriendo a todo el que se quedaba estupido mirandola, parecia amable, y sus ojos eran dorados. A pesar de ser vegetariana, seguia exixtiendo un riesgo, que era innecesariamente estupido correr... Sentia curiosidad por saber lo que tramaba, pero queria proteger a los que amaba, y por supuesto la discrecion que existia en esos tiempos. Pense en acercarme, pero solamente deje reposar mi espalda en una columna y cruce mis brazos, solo la observaba, seguramnete abria notado mi imperiosa presencia, o ya la notaria...espere con paciencia.

Todas las miradas apuntaban a mi, si no eran chicos, hicas tambien lo eran, despues de todo era nueva y aun mas llamtivo, a diferencia de la mayoria presentes ahi, tenia un aspecto muchisimo mas joven, de entre tanta gente que su mirada clavava en mi, una bella chica llamo mi atención, al igual que todos me obserbava, pero seria la forma en la que me sentia reatada a mirarla la que llamaba mi atención, pero de una u otra forma hice caso omiso a su presensia y segui recorriendo esos largos pasillos, saludando amablemente a todo el que se me cruzara, al parecer mis planes no estaban muy alejados de la realidad, pese a que era extraño pera una persona "normal", en tan solo un dia adoraba la escuela, era tan sencillo, pero aun muy alejada de mis alegres pensamientos, aun me preguntaba si estaria bien crear lazos con humanos, si no habia podido con Renesmee, la media vampira que dias antes habia conocido, una combinación entre mi especie y con que deseaba relasionarme, si no podia crear lazos nisiquiera con quien era mas facil, ¿Podria hacerlo con humanos? y ¿Cual seria la consecuencia?, por ahora solo debia pasar desapercivida en la escuela, aunque seria dificil con gente como la chica que mi atención habia captado posada en una columna, ¿Porque llamaria mi atención?, de nuevo hice caso omiso a esos pensamientos, igual solo era una de las tantas personas que durante esos momentos habian dirigido su mirada a mi.

La niña inmortal caminaba con una aparente confianza por los pasillos, había captado mi mirada pero era imposible que no se haya dado cuenta de quien era... La seguí sigilosamente, intentando no llamar demasiado la atención, me encontraba cerca y si era lo que pensaba, debía oírme -Niña...estas perdida acaso? ¿quien eres?- las palabras salieron con delicadeza por mi boca, parecían acariciar la brisa, eran prácticamente imperceptibles para un simple humano que estaba apurado en entrar a clase. Mi imperiosa mirada seguía cada uno de sus movimientos, era realmente bonita, de estatura media pero en su sonrisa había un leve destello de sed, ¿Seria capaz de controlarse? ¿quien era esa niña que se movía cautelosamente por los pasillos del instituto? Sus pasos ágiles, parecían dar pequeños saltos rítmicos y gráciles...era bonita.-mi nombre es Rosalie Hale...

Rosalie Hale, lindo, mi nombre es Miku Hatsune, un gusto conocerte-Respondi amable y educadamente ante su presentación, me pregutaba de donde habia salido, realemnte no habia notado su presencia, talvez seria porque no me concentraba en hacerlo-Soy nueva estudiante, solo estoy conociendo la escuela por ahora, eso se responde como no estar perdida-Conteste a las preguntas que momentos antes de su presentación me habia formulado, desde el momento en que habiamos comenzado a hablar las miradas se mantenian aun mas dirigidas a nosotras, la chica era realmente linda, asi que no seria erroneo pensar que podria ser basicamente la abeja reina, la chica por decirlo calificada por la mas popular debido a ser la mas hermosa, aunque bueno, eso lo descubriria conforme me familiarisaria con la gente de la escuela, despues de todo mi plan era presisamente divertirme durante mi estancia ahi.

-gracias! -fui lo mas amable que pude, mi sonrisa parecía un poco falsa, pero era mi mejor esfuerzo...Parecia estar asustada con mi parecencia la pequeña -Te gustaria acompañarme, mientras charlamos...-le extendia mi hermosa mano, pero, suponia que debia hacer mas que eso para que confiara en mi...-No es mi intencion asustarte, pero hay cosas que es necesario que sepas y por tu seguridad y principal la mia y la de mi familia debemos hablar...- tome su mano que estaba extendida a su lado y con respeto le indique el camino- ademas, alguien deberia indicarte las aulas...-sonrei, y diriji mi miada hacia los niños de nuestro alrededor. Me sentia extraña, ¿amable con una desconocida, yo? deberia sentirse privilegiada pensé. Acomode mi cabello en los hombros y espere con poca paciencia su sumisa respuesta.

Muy bien, entonces caminemos-Conteste con la educación nesesaria, pese a que intentara ser amable se notaba demasiado su fingida sonrisa y su intento por ser amable, claramente yo no debia fingir, pese a que ella lo hiciera a mi me alegraba bastante el hecho de comenzar de la mejor manera con buena reputación aunque si me molestaba un poco el hecho de saber que yo con las mejores intenciones y ella fingiendo, aunque tambien me daba curiosidad saber cual seria el tema de conversación, sobretodo por la forma en la que se referia a la palabra seguridad y la palabra familia, habia cierto interes que me impulsaba a aceptar su invitación pero claro que no le tenia confianza, como se notaba que era pesima para fingir, demasiado obvia, pero por ahora lo mejor era seguir con eso hasta saber en torno a que iria la platica.

Su vista juiciosa y amarillenta, demostraban a flor de piel que no confiaba en mis palabras. -Lamento tener que hacer esto pequeña, pero no estoy dispuesta a correr riesgos- mi mirada tranqilizadora abrazo nuestra platica. Me costaba mantener mi postura, Las personas seguian pasando a nuestro lado, curiosos, como si quisiesen opinar o interferir en nuestra conversacion...uno de ellos hipnotizado por mis encantos hasta se tropezo y se me escapo un risita imperceptible, casi imperceptible -Coma ya sabes, hay reglas y una novata que se precenta en la escuela com si fuese experta es... peligrosa- dije muy suavemente, dando un paso para delante -¿que sabes sobre los vulturis?-remarque la ultima palabra, subiendo una ceja... Estaba informada?

Al pronunciar sus primeras dos frases comenze a examinarle de pies a cabeza, ella no era precisamente muy confiablepara relacionarse con humanos, no me parecia alguien muy normal que se pudiera decir asi que no tenia porque darme sus clases hacerca de si desconfianza, porlomenos yo estaba adaptada al mundo humano, no los tocaba y la sola idea de hacerles daño me daba asco, la sangre humana me parecia algo comun, no me parecia lgo mejor que la de los animales.

¿Vulturis?-Pregunte incredula, quien eran esas personas a las que se referia, sinceramente no encontraba sentido a esa pregunta no habia conocido a nadie con eso nombre o apellido en la vida asi que solo le mire con una cara llena de curiosidad intentando adivinar porque habria sido la pregunta.

-Los Vulturi son un clan con suficiente poder, y tiene reglas, que hay que obedecer- tranquilicé mi voz, la suavicé. mientras abrazaba mi torso mi torso, demostrando independencia. -Si te descubriesen, querrían... justicia- Comencé a caminar lentamente, esperando a que las personas me den paso, para no tener que rozarlas, ni tener que acercarme demasiado. Naturalmente, la pequeña no estaba enterada de que no se permitían vampiros de su edad; que corría un grave riesgo exponiéndose de ese modo, sin saber que unos cuantos Vulturi rondaban por la zona. Pero no era mi problema, la ayudaría si me pidiese ayuda, pero su insolencia me exasperaba. Por lo que me alejé unos pasos para que pudiese reflexionar sola, para que intente comprender la situación.Además de la pequeña rubia, la lluvia no cesaba y Emmett no estaba, se había ido de casería con no se quién. Suspiré rendida, por que el día comenzaba a stresarme.

Escuche sus palabras, sinceramente me daba mucha gracia, que cosa tan mala podria yo estar haciendo, solo intentar adaptarme a los humanos como lo venia haciendo desde hacia mas de 50 años, puede que mi apariencia no fuera de lo mas prometedora y que pudiera pasar como una vampira que no lleva demasiado de ser convertida, pero yo era bastante diferente a las expectativas, por alguna razón mi crecimiento se habia detenido, un gran punto a mi favor, pero aun asi tenia bastante edad como para vivir con humanos y aprender a controlarme sin la nesesidad de alimentarme de los humanos, sin duda mi forma de pensar era seguramente mejor de lo que muchos vampiros vegetarianos podrian aspirar, yo no pretendia lastimar humanos, solo integrarme, que podria estar hacieno en contra de esos vulturi, a menos que tuvieran pruebas de lo contrario yo era una persona completamente inocente.

Ese día sin duda alguna se estaba poniendo interesante, divertidamente interesante, continue riendo y al ver como caminaba la chica me fui en sentido contrario riendo y saludando a todo el que se me cruzaba, la gente me abria el camino haci que no tarde mucho en regresar al salón de clases, estaba muy alegre y agusto, mi ego estaba mas elevado de lo común, sin razón alguna, o talvez mi razón era estar segura de una superioridad que nadie mas podia alcanzar, tanta gracia me causaba que dejar de reir no era una opción.

Oía sus pasos a mis espaldas. LA niña no confiaba, ni confiaría en mi. Igualmente, yo le había advertido, su edad era una buena causa que provocaría la ira de los Vultuti. No era mi misión protegerla, yo tenía mis propios problemas... Su insolencia en inmadurés no eran racionales ami pensamiento. ¿Por qué una persona debía desconfiar de otra a tal punto? No me moví ni un paso, hasta haber perdido los suyos. Luego, sin remordimiento ni culpa de su futuro, acomodé mi sacó y lleve mis cabellos dorados a mis hombros y esperé a que los revoltosos alumnos me dieran paso como de costumbre... Y la dejé ir, libre y sin consejos.

OFF// Miku: ¿tenes algún punto? o lo cierro? .

off:como quieras n.n