Plan de hermanas (Elizabeth, libre. noche)

Mi vida corría lenta y agoniosamente, cada putrefacto segundo se había vuelto eterno desde mi desdicha, desde que el amor me había golpeado con su lado más horrendo.
Ahora estaba sentada sobre el gran sillón de mi dulce hermana Elizabeth, su apoyo y cariño incondicional me mantenía flote delas grandes aguas que me arrastraban a mis desgracia, ella era como una balsa llegada en el momento preciso. Recargue mi rostro cobre mi brazo, con la mirada perdida, sumergiéndome en el pasado, en la época feliz, esos años que tanto añoraba regresaran o yo volver a ellos para romper este sufrimiento eterno.

¿Cómo era posible amar sin ser amado? ¿Porque la vida suele ser tan injusta y cruel? Preguntas como esas rondaban en mi cabeza, con un zumbido constante y estruendoso, nada lo podía callar, era imposible ignorarlo, solo estaba ahí recordándome lo infeliz que era. Yo siempre había sido buena, no causaba daño alguno a mis prójimos, odiaba la violencia y, más sin en cambio, la vida me lo devolvía de una manera cruel.

Desde el momento en que Matt había decidido romperme el corazón y seguir con su vida sin mí no hice nada más que caer en pedazos diminutos, nadie podía reparar aquel corazón destrozado y adolorido, solo Matt que no planeaba regresar a mí. Pero el hecho que el no quisiera estar conmigo no me impedía verlo de lejos, observar cada movimiento que hacía, cada amistad que conseguía. Durante años lo había observado y sabía lo que planeaba y pasaba por su vida eterna, mi regalo.
Sabía que en algún momento hizo amistad con un vampiro llamado Yaeel Lovlier y que este mismo era el único que apreciaba realmente. También sabía que nunca había tenido el sentimiento del amor. No hasta hace unos meses y eso me hería mas, haciendo mi yaga más grande conforme pasaba el tiempo.

Hacia unos meses atrás había conocido a una vampira llamada Katherine Owen y parecía que fuera amor a primera vista, desde entonces la acoso hasta lograr que fuera su pareja. Si la amaba no lo sabía con certeza, quería pensar que el solamente jugaba con ella y a quien amaba realmente era a mí. Quería que él se diera cuenta que a quien amaba realmente era a mí y no esa vampiresa llamada Katherine, y si no era así yo me encargaría que dejara de amarla, que viera realmente la luz, porque ahora estaba cegado por algo que él creía amor.
Al final todo saldría bien, de la manera que era correcta y en la forma que debía ser. El regresaría conmigo y la tal Katherine se podría ir a jugar con alguien más.

Suspire y espere con deseos y anhelo a que pasara aquel día, lo esperaría con ansias locas y lo devoraría con latitud para disfrutarlos como realmente debía ser.

Estaba recostada en mi cuarto viendo la television

Me pare rapidamente a ver donde estaba Nathaly, escuchaba nungun ruido en la casa mas que el televisor, Nath estaba recostada en mi sillon. Me sente a su lado, no sabia que decirle a Nath.

Ella era demasiado buena para merecer el daño que le hizo ese tal Matthew, me preocupaba de uqe mi hermana estubiera obsecionada con ese hombre. Yo sabia que Matt nunca le ibaa hacer caso a Nathaly solo la uso, el no era como penso esta Nathaly eso me molestaba mucho, ella no reaccionaba como deveria de ser.- Nathaly sabes algo... Matt te uso.- Yo pensaba que con eso iba a reaccionar, pero no lo hizo tardo un poco.

Nathaly siempre lo a buscado junto conmigo, siempre tenia que estar del lado bueno, y a poyar a Nathaly como ella lo hace conmigo, tenia que estar con ella en las buenas o en las malas.

Agare a Nathaly de los hombros y lasacudi lentamente y le dije.- Nathaly tienes que reaccionar por un momento.- la deje de sacudir, y la deje por un momento a solas.

Llegue y ella seguia como una estatua me preocupe un poco pero vi que se recargo en el sofa.

Las imágenes pasaban en una sincronía lenta y rítmica, como aquella canción que se toca en los funerales. Mi pasado se reaviva dejando a un lado el presente y mi posible futuro. Era consciente de que si me quedaba varada en mi pasado milagroso, y a la vez, agonioso no podría avanzar más allá, no podría alcanzar mis metas, mis deseos, no me podría realizar.

Dar vuelta a la página solo era una opción en el manojo de cartas que se abrían como abanico frente a mí, tenía tantas posibilidades de hacer que Matt regresara a mí, sin dañar nunca a la patética morocha de gestos engreídos, tal vez si llegaba a observar mejor daría en el punto débil de su "relación"... Ahora ¿Cuál era el punto débil de su relación? Tenía que haber uno, por lo menos. Rebusque en mi memoria.

Desde que había espiado a Matt y el encuentro con Owen todo había corrido con un desliz, al principio ella no le importaba mucho Matt, solo era su acosador, su fastidio, ella había conseguido a otro vampiro, pero ¿Dónde estaba ese vampiro? Tal vez la había dejado y por eso ella estaba con mi Matt. Tenía que haber otro. Ahora no solo estaba en observar a Matt, tenía que espiarla a Owen, tenía que ver su punto débil, aquello que doblegara a ambos a dejarse...

Mientras hacía estas pesquisas, absorbiéndome en mi mundo, olvidando todo, algo me tomo por los y me dio unas leves sacudidas con cariño y suavidad. Enfoque la vista y vi a mi hermana con el semblante empapado de preocupación sensata, alguien como ella era incapaz de mentir.

Me comenzaba a detestar a mí por ser alguien egoísta, en pensar solamente en mí y nada más en mí. Beth siempre había estado a mi lado, desde que nos quedamos solas hasta ahora, ella mi apoyo, el cimiento más importante que no permitía que este edificio callera hecho ruinas.

Sonreí levemente, con cariño y ternura. Le estaba agradecida por tanto amor y sobre todo de tanta paciencia en estos eternos años.-Lo siento, hacia planes.- Me disculpe con la pena reflejada en mis grandes ojos miel.- Pero creo que te equivocas, él no me uso, simplemente está confundido, eso es todo, ya verás cómo pronto regresa a mi.- Me levante y camine hacia la ventana, mirando la amplia ciudad que ahora nos pertenecía a los dos, a Matt y a mí. -Solo debo encontrar un punto de debilidad.

Sabia que ese hombre de cuyo nombre Matt nunca iba a regresar con mi hermana, ella siempre lo espiaba, eso casi no me interesaba, pero mi hermna estaba obseionada con el, cosa que la ya no le importaba estar con ella.

El solo la uso, eso pienso yo, no sabia por que Nath estaba tan obsecionada con el.- Ash... Nathaly reacciona, el nunca te va hcer caso, tu sabes que solo te uso. Ya sabes cuanto me duele verte que etes tan trite, por ese hombre que no vale la pena, vigilarlo.- dije haciendole los ojos en blanco.

Yo ya sabia que el no la queria, eso me molestaba un poco, de que Nathaly estaba ta obsecionada con el.- Nathaly estamos en la vida real, no e una pelicula.- dije con un tona mas fuerte.

Me acoste en el gran sillon rojo de piel, en lo que Nathaly estaba en la gran ventana, ilucionando, verse ella y Matt, cosa que nunca iba a pasar.

Las luces que predominaban en la gran ciudad parecían diamantes u oro líquido, tan brillantes y bellas.
Posee una de mis manos sobre el cristal dejando que una vaga ilusión me inundara, deseaba calmar aquel dolor que me provocaba pensar en Matt, en saber a conciencia que él no me amaba, de que estaba con otra y no era yo quien ocupaba su corazón.

La vocecilla de mi hermana me volvió a sacar de mi mundo. Me reprochaba por estar en un estado de "zombie", me hacía ver la realidad, ver el mundo con sus ojos, algo a lo que yo me cerraba por completo por el temor de caer devastada por la verdad. Mi mundo era más agradable, pero solo era un ilusión estúpida y sin sentido, a verdad era que Matt no me amaba, me había usado y me tiro como basura yo en vez de odiarlo y quererlo matar estaba ahí, amándolo con todo mi ser, desviviéndome por él aunque él no se diera cuenta de mi presencia.

Suspire y me voltee para encarar a mi hermana.-Tienes toda la razón hermana. El me uso, no me ama... Pero eso no me importa en lo absoluto, hare que me ame que vuelva a mí, ya lo veras.- Dije con la voz llena de seguridad. Me lo estaba proponiendo, el sería mío de una buena vez.

Nathaly me precupaba y a la vez me daba coraje de que ella estaba tan obseciona con es hombre el tal "Matt", me daban ganas de matarlo para que mi hermna ya no sufriera.-¡¡¡¡¡¡NATHALY TIENES QUE REACCIONAR!!!.- dije con uan voz mas fuerte. Me pare hacia donde estaba Nathaly, la agarre de los hambro y la sacudi.-¡¡¡ NATHALY TIENES QUE REACCIONAR, ESTE ES EL MUNDO REAL NO ES COMO EL E LAS PELICULAS.- dije con gran desesperacion.

Me fui a la cocina a limpiar lo que estaba sucio, luego fui al baño a limpiarlo,en lo que Nathaly pensaba bien lo que le dije.

Estaba tan enojada que no sabia que hacer, me encerre en mi cuarto y avente mi florero a la pared. Ya habia salido de mi cuarto, asote la puerta, Nthay tenia una sonrisa diabolica e su hermosa cara.

Mejor era quitarme ese coraje, y mejor prendi el televisor y le puse en un canal de cocina.

Aun miraba la imponente ciudad levantarse frente a mis ojos dorados. Sabía que la paciencia de mi hermana no tardaría en dispararse y terminaría gritándome como ya era su costumbre.

Fue solo cuestión de segundos para que explotara como una bomba de tiempo. Me tomo con fuerza de los hombros y me sacudió con desesperación dilatada en sus pupilas y sus gritos ensordecedores. No hice más que mirarla sin decir una palabra, de uno u otra manera tenía toda la razón del mundo, pero yo ya había tomado mi decisión y no la cambiaria, ni por ella.

Luego mira cómo se perdía en los cuartos de nuestro hogar, limpiaba desesperadamente los lugares para deshacerse de su furia. Luego, con los mismos pasos determinantes, la vi encerrarse en su cuarto y luego el sonido de miles de fragmentos de vidrio resonó por todas partes, no necesitaba ser una adivina para saber que estaba enfurecida y rompía cosas como una loca desquiciada.

Suspire y seguí viendo incontables segundos la ciudad, pensando y reiterando mis decisiones, convicciones y planes. Esta vez no había vuelta atrás, haría lo que fuera para tener a Matt a mi lado, si mataba a la tal Katherine no sería problema. Esta vez sí me hermana estaba en mi contra, la dejaría seguir un camino, el que ella quisiera.

Me volví y camine hasta su habitación, de dónde provenía un sonido de personas hablando, abrí la puerta de un empujón y la vi recostada sobre la cama viendo el televisor.
Me recargue en el marco de la puerta y le clave la mirada, mientras decía:
-Beth, es cierto lo que tú dices, pero también es cierto lo que yo digo. Tome mi decisión y es obligar, si es necesario, a Matt para que regrese conmigo. No sé si cuente con tu ayuda, pero de no ser así, hermana eres libre de hacer lo que te plazca.- Entone mientras me daba media vuelta y cerraba su puerta de un jalón.

Nathaly parecía que estaba en otro mundo, en el mundo de las películas, eso me hacía enojar y mucho.- Bueno, Nathy te dejare ser "libre", como tú dices, pero luego no quiero que vengas, con tus ojitos de perrito.- dije con un tono burlesco y una sonrisa burlona en mi cara.

Estaba acostada viendo la televisión, le puse en el canal de Animal Planet, ese canal me encantaba ver cómo, cazaban los felinos, y aprendía mucho mas de esos animales.- Nathy, perdón por lo que dije de tu "amigo Matt".- solo dije abrazando a Nathaly, oír ese nombre me retorcía de coraje

Escuche cada palabra que soltaban los labios de mi hermana, lo decía con tal veneno y burla que sentí como si me acuchillara, ella que era mi única familia dado a que nuestros padres eran adoptivos.

No deje que esas palabras llegaran más allá, que me hicieran estremecer por la verdad. No, yo saldría y regresaría con él a mi lado, como debía ser.

Camine unos pasos hacía la ventana abierta, era hora de salir y empezar a hacer movimientos, mi jugada así fuera con o sin mi hermana. Pero antes de prepararme ella salió de la habitación pidiendo perdón, sonreí amablemente y me volví para regresarle el abrazo.
-Tienes razón hermana, pero tengo que intentarlo.-Dije en un susurro.