Fingiendo estar bien (tarde, soleado. Libre)

El sol se alzaba en lo alto del cielo, lanzando sus rayos por todo el lugar, embelleciendo más el azul puro del mar y la pureza de la arena. Caminaba con pasos lentos, dejando mis huellas marcadas en ese lugar en un sendero irregular. El astro rey hacia florecer en mi piel un tenue pero marcado brillo, por lo que una parte de mi mente se ocupaba expresamente de estar atento a presencia humana, vigilando pasos o respiraciones. El resto de mi mente estaba vacia, dejando mover a mi cuerpo por inercia, casi sin sentido, casi como si no tuviera motivos para caminar. Estaba demasiado abtsraida por el brusco cambio que mi feliz y monotoma vida habia dado, por lo que inevitablemente sentia que perdia dia a dis mi niñez e inocencia... ahora estaba rodeada de snagre, muerte y vampiros malos. Miré el mar y por unos instantes me perdí en él, dejando volar mis pensamientos para ocupar mi mente con esa serenidad y delicadeza.

Esta era una hermosa tarde, una tarde perfecta a decir verdad, el mar era hermoso reflejando todo el bello esplendor del sol, solo podia ver el mar y nada mas, enese momento no me importaba nada mas que esa vista, despues de todo no recordaba ningun pasaje mejor que ese, toda mi existencia grabada en mi mente estaba en blanco y lo unico que podia recordar eran esos pasajes de soledad y tristesa, pero no ahora, no en ese momento, justo en ese lugar donde todo era perfecto cualquier pensamiento ajeno a ese bello escenario tenia que ser producto de una pesadilla o el mundo real, quieria quedarme ahi, vivir por siempre en ese cuadro, en esa perfecta pintura, una que pese al paso de losños perduraria, aunque supiera que la tarde y el dia no eran para siempre, pese a que sabia que ese paisaje no era mas que un simple sueño que estaba por terminar.

Entre mi perfecta imagen del mar, apareció un brillo deslumbrante y hermoso, un diamente que emitia su luz desde el fondo del mar. ¿Que es..eso? ¿O era un reflejo? Mis ojos desorbitados se detuvieron en la causante de ese resplandor, era un niña de cabellos castaños que caminaba despreocupadamente por la playa. No puede ser.. es una niña inmortal Sabia que estaba totalmente prohibo por los Vulturi crear o siquiera tener contacto cone sas criaturas, esos seres sin mentalidad de su forma y de las leyes que regian a su raza. La niña miraba el paisaje fascinada, mientras que yo clavaba en ella una mirada de pavor y confusión. ¿Que debia hacer? No podia dejarla sola vagando por ese lugar, era peligroso... pero si me veian con esa niña podrian acusar de mi familia de su transformación y el castigo seria la muerte. La decision fue tomada por el destino cuando unas voces adolescentes resonaron en mi cabeza, venian apresuradamente hacia la playa, y si doblaban verian el resplandor de la chica bajo el sol. Sin pensarlo crucé la playa a una velocidad muy poco humana y tomando delicadamente a la niña entre mis brazos contra mi pecho la llevé con el mismo envión hacia debajo de los acantilados, donde la sombra refugiaba nuestros cuerpos. Volteé hacia la procedencia de las voces, al tiempo que un gran grupo de chicos corrian por la arena hacia el mar, no habian notado nada. Miré a la pequeña vampira que me miraba extrañada y aflojé mis brazos.
-Ehmm hola -titubeé un poco- ¿Que haces aqui?

Lo mismo que tu, disfruto de la vista-Le conteste a la chica que me tenia contra su pecho mientras lentamente me soltaba, era un poco extraño como de un momento a otro de disfrutar la vista mas hermosa y perfecta mientras piensas en el presente y el futuro debido a no recordar el pasado, y al otro te encuentras bajo los acantilados con una extraña compañia que pese a su belleza no deja de ser una extraña que no sabes si te ayuda o te daña, igualemnte no me encontraba preocupada, es como si ella no fuera una extraña para mi, aunque estaba tambien segura de no conocerla pues recordaria a tal chica si lo hubiera hecho., ademas de que aun me intrigaba mi presencia en ese lugar y el hecho de que ella estuviera tan cerca mio ademas de la razon de que tan solo en un parpadeo me encontrara en otro lugar.

Su voz era tranquila e infantil, como una pequeña niña humana... pero de igual manera se percibian aires de.. ¿experiencia? Demasiada serenidad para ser una neofita ¿Se habria dado cuenta de lo que yo era? Inspeccioné sus ojos, pero incluso bajo la sombra penumbrosa del gran acantilado resaltaban sus ojos dorados brillantes. Tal vez ella jamás se hubiera cruzado con alguien como yo, con un corazón latente y ojos chocolates.... pero mi velocidad y fuerza..
-¿Como te llamas pequeña..? -mi voz era suave y me agaché hasta su altura, haciendo la interrogativa más que cortecia que por verdadera curiosidad. -¿Estas.. acompañada por alguien?

Me llamo Miku, mucho gusto-Le conteste con mucha tranquilidad algo en ella era peculiar, algo que me inspiraba cierta distancia-y no, no estoy acompañada-Le conteste a su segunda pregunta, parecia que ella en cierta forma sospechaba que no era humana pero eso no quitaba que pensara que era una niña o porlomenos me trataba como una-¿Y cual es tu nombre?-Le pregunte con el mismo tono de curiosidad con el que ella ami, queria conocer el nombre de esa chica, talvez alguna vez la llegue a conocer y por eso me inspiraba tanta confianza.

La escuché manteniendo la calma, la cual se hizo verídica cuando mencionó que nadie la acompañaba. Eso tenia su lado bueno y malo, ya que una niña inmortal sola podia producir caos si no sabia regirse por las reglas de nuestra raza.
-Mi nombre es Renesmee Cullen, y lamento haberte traido aqui pero es peligroso si alguien te ve bajo el sol... ¿Que nunca te lo dijieron? -suspiré y me senté en una gran roca, inspeccionando a la chica. Parecia de mente pacifica y sus ojos eran color dorados, eso era positivo- ¿hace cuantos años eres un vampiro? -por su mirada sabia que ella pensaba que yo era humana, y que ciertamente mi pregunta la tomari apor sorpresa. Intenté parecer tranquila, pero desconfiaba de esa muchacha en cierto modo.

No lo se, no mas de 70 años supongo-Le conteste tranquilamente, su pregunta dado que confirmaba mis sospechas de que sabia que no era humana y por la constitucion de su pregunta supuse que tampoco lo era, con los años habia aprendido a diferenciar a vampiros y humanos, y al parecer ella no era humana, pero tampoco vampira asi que supuse seria hibrida o algo parecido, despues de todo en mi tiempo libre siempre me fue divertido leer sobre vampiros y todo eso. Pense que seria divertido si ella corroboraba mis sospechas-Me supongo tu tampoco eres una humana verdad-Le dije con una pequeña risita pero aun muiy tranquila y serena, no me sorprenderia que no fuera humana, eso expolicaria su velocidad y fuerza sobrehumanas.

Setenta años.. esa era la cifra que habia dicho, entonces no podia considerarse peligrosa... habia pasado demasiado como para cometer estupideses. Un escalofrio recorrio mi cuerpo al pensar en la madre de las vampiras de Denaldi, cuando se vio involucrada en la transformación de niños inmortales. Los Vulturi no perdonaban, y sus castigos eran ciertamente fatales. Me trajo al presente su suave y melódica risa, la miré extrañada pero comprendi sus facciones divertidas cuando formuló su pregunta e voz alta. Tambien me rei y miré el sol radiante que se extendia sin fronteras por toda la playa.
-Es verdad... no lo soy completamente... -miré su rostro palido y terso y no pude evitar extender mi mano hacia él y acariciarlo. Su tacto era demasiado frio, contrarrestando con el mio ardiente como las llamas. Supuse que le incomodaba y retiré mi mano, pero mis ojos chocolates la miraban fascinados y con suma ternura.- Nunca habia visto a alguien como tu... eres tan pequeña y hermosa.

Rei ante sus palabras, al decir que no lo era completamente y que su tacto tuviera una temperatura elevada y no fuera fria como la de un vampiro sus piel, solo me hacia pensar que era una semi vampira, una hibrida.
Volteé mi vista hacia el mar, era tan hermoso, no pude evitar observar sus ojos que con los rayos de sol resaltaban su hermoso color chocolate, era un bella escena, digna de incluso una pintura.
Muchas Gracias-Dije finalmente, no sabia exactamente porque agradecia, talvez seria por el cumplido o talvez por el hecho de por asi decirlo salvarme, sabia que facilmente me hubiese movido sola, pero que lo hubiera hecho otra persona no estab mal.
¿Y tienes novio?-Pregunte indiscretamente, queria crear una conversación con la señorita Renesmee, puede que esa no fuese la pregunta adecuada, pero era la unica que me venia a la mente en ese momento, nuevamente solte una pequeña y discreta risita, pero igualmente esperaba su respuesta o algun gesto que diera respuesta a mi inadecuada pregunta.

Dirigio su mirada paera el mar, y yo busqué con mis ojos que podria estar viendo, pero claro no era necesario un unico punto de distraccion en ese bello paisaje. Cerré mis ojos y salí un poco de debajo de la penumbra en la que estbamos, para que el sol llegue hasta mis pomulos y pude notar como mi temperatura aumentaba incluso más de lo normal. Pero lo que dijo... la pregunta que formuló captó mi atencion y me trajo de nuevo a la realidad. Mantuve la respiración y torcí mi cara en un gesto. No abri los ojos y no volvi a hacer ningun movimiento, ya que mi cabeza hacia demasiados procesos como para tambien concentrarme en lo que debia hacer con mi cuerpo. Miles de imagenes pasaron en mi mente, incluso hasta algunas de cuando era una bebé... todas completamentes caras, recuerdos felices... pero algo más habia en ellas, algo repetitivo y presente en cada recuerdo. ¿Desde cuando mis sentimientos habian cambiado tan bruscamente? ?¿Que sentia él que me habia visto crecer y siempre habia estado a mi lado? Desde el primer momento que me tuvo en sus brazos habia sentido hacia él un lazo de posición infinito, él era solo mio y jamás me lo quitarian... pero ya no era como antes, yo ya no era una niña y nuestra relación habia cambiado.. ¿Pero de que modo?
-No... no tengo novio -solté el aire que tenia dentro mio y lentamente abri mis ojos, buscando su mirada para volver al presente. Un dolor agudo se formó en mi pecho, pero lo ignoré para continuar con la chica.- Los niños inmortales estan prohibidos, ¿lo sabes? Seria demasiado peligroso que un Vulturi te viera...

Volteé de nuevo a ver el mar, era bellisimo, de nuevo el pasaje perfecto pese a la penunmabra en la que nos encontrabamos yo y la joven Renesmee, escuche su repuesta y rei, al escuchar su pregunta respuesta mi cara solo se volvio mas seria, sabia eso, pero a decir verdad no le tomaba importancia, talvez los niños inmortales estaban prohibidos, y talvez seria peligroso toparme con alguien de la guardia o la realeza Vulturi, pero despues de todo que seria lo peor que podrian hacerme, no me preocupaba eso en absoluto, habia pensado antes en eso, en toparme con algun licantropo, y viceversa, pero no me importaban las consecuencias, despues de todo nada tenia que perder, no tenia familia, amigos, a nadie ni nada en el mundo, salvo a mi misma y nisiquier era yo algo que me fuera importante.
Lo se, pero no me importa-Le conteste en un tono rebelde, como una niña consentida que hace un berrinche, aunque hubiera querido sonar mas madura, mas deacuerdo a mi edad y mi experiencia, seguia siendo una niña, porlomenos fisicamente.
¿Que seria lo peor que podria pasarme si me topara con algun Vulturi?-Dije mas sarcasticamente que como una pregunta, sabia que para mi no era un riesgo que eso sucediese, pero si le preocupaba a ella seria por algo, igual, no dejaba de anmirar ese hermoso paisaje con una sonrisa que correspondiera a la tranquilidad que se sentia en ese bello lugar.

Parecio abstraerse nuevamente observando el mar, pero muy en el fondo algo me decia que era debido a mi pregunta. La escuché en silencio, cuando habló con un tono de voz algo huraño y hasta desinteresado, como si su vida no valiera nada. Un puño se formó sobre mi falda y no puede evitar tambien, volver mi contestacion de forma brusca.
-¿Pero como puedes decir eso? ¿Es que no tienes aprecio por nada..? ¿Solo dejarias que te...maten?- sentia una furia en mi interior que desconocia, una impotencia que brotaba de mi interior floreciendo como una enredadera por mi garganta- Mira, se que... tal vez sea dificil y a ti no te guste si no estas acostumbrada a un aquellare... pero podrias quedarte un tiempo aqui, hay muchos como nosotros que buscan tener una vida normal y dejar de huir por miedo a lo qu elos humanos puedan reconocer..

Relajate-Conteste con un dulce tono, mas que como orden lo decia como consejo, a decir verdad no entendia porque se alteraba tanto, esa era mi vida y no la conocia ni me conocia suficiente, al escuchar sus palabras solo pensaba en que aunque tuviese razón su forma de pensar era diferente a la mia, a ella podia importarle, pero a mi no, efectivamente no me importaba ser asesinada, si, una vida normal sonaba bien, pero por los vagos recuerdos sabia que no queria relacionarme con nadie, en mis planes no estaban si acaso tener a alguien con quien hablar.-No me importaria, no me importaria morir a decir verdad, no tengo nad que perder mas que una insignificante vida, no conosco a nadie, no importaria, no tengo nada, mas que una casa, un hogar vacio sin la esperanza de saber que alguien me espera, no hay sentido sobre el cual gire mi vida, yo solo vivo por hacerlo, nisiquiera me gusta estar viva, si me puedo considerar viva claro, ademas que podrias saber tu, lo diras porque tu talvez si tendras razón de vivir, pero yo no-Respondi, aun estaba tranquila, muy relajada admirando el paisaje, admirando la belleza de el mar que se iluminaba por los raoys del solo, y de la bella chica que dejaba llevar sus cabellos por el suve resoplido del calmado de viento que se movia con la gracia de una dulce cancion y un baile que expresaba felicidad y una belleza sin igual.

Me sentí acomplejada con sus palabras, con su tono tranquilo pero sus pensamientos negros y filosos. Me pregunté que pudo haberle pasado para que sintiera esa aborricion haci ala vida, pero recordé que la mayoria de los vampiros pensaban asi, creyendose unos monstruos sin alma que no merecian otra cosa mas que morir y que sus restos sean quemados bajo mil fuegos de culpas y odio. Sentia como mis lagrimas luchaban por brotar de mi rostro, pero las contuve por el hecho de que no pensara que sentia compación por su existencia y se enojara. Queria abrazarla, hacerle sentir que todo estaria bien si le daba una oportunidad a vivir una vida, a tener gente que podia llegar a queerer... pero oculté todo ese sufrimiento en una porción alejada de mi cabeza y transformé mi rostro con una máscara de frialdad absoluta.
-Al fin y al cabo, creo que es tu decision y no deberia interrumpir... ya que no nos conocemos y no quiero parecer una metida... además que tu tienes muchos más años que yo y seria malo para vos que te tratara como una niña -suspiré para relajar mi postura y mis facciones, asi que aproveché ese instate y lo disimulé parandome y llendo bajo el sol. Los hamos ya se habian ido lejos, buscando la zona de la playa donde las holas crecian a tamaños gigante sy podian surfear sin sufrir lesiones. Dejé que el sol se deslizara por mi piel y provocara un tenue brillo que hacia sobresalir mi vestido color chocolate que llevaba. No sabia que más decirle, ya que temia a sus reacciones, solo parecia gustarle el paisaje asi que le dejé para que en su mente decidiera si queria seguir hablando o no.

A decir verdad, pese a que seas mas joven estas en todo tu derecho, despues de todo no eres tu la que tiene fisico de niña humana de primaria-Le dije con una risita un poco rigida, intentaba hacer el ambiente mas comodo, la joven se habia levantado, observaba como el sol pegaba su piel que se volvia dorada como el sol, si yo fuera Da Vinci, ella seria mi monalisa, era todo hermoso, todo perfecto, aunque preferia el ambiente fuera mejor, no sabia si queria seguir observando o salir corriendo para escapar de preguntas, ademas de que me agraba esa platica, y eso era algo que no podia consevir, no queria lazos de ningun modo, pero tal vez esta seria un esepción, tal vez tenia razón y debia integrarme a la normalidad, pero era dificl pensar en que despues de 70 años debia cambiar mi vida y darle un giro de 360 grados, aunque no estaria de mas intentarlo.-¿Crees que me podrias ayudar con una vida normal?-Pregunte inocentemente como si fuera una niña, talvez ya seria tiempo de que comenzara a pensar como una, despues de todo nunca lo habia hecho, a lo mejor seria divertido, eso quitaria lo repetitivo de mi vida y daria una razón para mi existencia, esperaba su respuesta mientras me levantaba y me quitaba mis zapatos y mi ropa, bajo mi blanco vestido llevaba un bañador de estilo cerrado, como los que suelen usar las niñas pequeñas, me lanze al mar y comenze a nadar, no sentia nada, pero la vista era maravillosa, la temperatura de mi piel se acoplaba con la del agua, al igual que el color de mi cabello con los rayos de sol, era como un paraiso, un calmado paraiso donde la palabra problemas no tenia significado.

Mientras disfrutaba del viento y el sol una de sus preguntas llamó mi atencion por lo que abrí los ojos y la miré, a ese rostro blanco y angelical que enmarcaba unos bellisimos ojos dorados y unos labios tan rosas como unas apetitosas frutillas. Se rió, provocando una deliciosa musica en el ambiente que se entremezcó con la brisa, y con sus palabras. Se quitó la vestimenta y cruzó lo que la separaba del mar, arrojandose contra las olas y moviendose en ellas con gracia. Me rei y decidí imitarla, ya que el dia eras precioso, por lo que me quité el vestido chocolate y lo doble sobre la roca dejandolo con sus prendas. No llevaba nada más, ya que habia ido descalza hasta La Push casi sin notar el detalle. Caminé a velocidad humana bajo el sol que hacia brillar los detalles de mi bikini chocolate, la cual conbinaba con mis ojos y mi vestido, algo que habia aprendido de mis tias. Toqué el agua, la cual parecia hielo derretido en contraposicion con mi temperatura elevada, pero eso no fue un impedimiento para que corierra contra las olas y me arrojara cerca de la muchacha con una sonrisa. El agua estaba deliciosa, revoloteando con firmeza a nuestro alrededor, sintiendo su suave contatco contra mi piel... apenas hacia pie, por lo que supuse que la niña estaria flotando.
-Por supuesto que puedo enseñarte a tener una vida... y si te gusta puedes quedarte con nosotros, yo me encargaré de cuidarte y enseñarte lo que debiste aprender hace mucho-volví a colocar una sonrisa en mi rostro y le arrojé un poco de agua con la palma abierta.

Sonrei ante su amable proposición, pero...-La idea es asombrosa, pero declinare la invitación a residir en tu vivienda-Dije igualmente alegre mientras chapoteaba un poco de agua salpicando su rostro con ella, intentaba imitar a una niña comun que se divierte en el agua, aun pensaba en esa proposición y aunque era muy dulce de su parte ofrecerme tal cosa no podia aceptar, despues de todo ella era una hibrida, union entre una humana y un "vampiro", cosa que me hacia sentir incomoda, apenas podia relacionarme con humanos, y temia un poco de los vampiros, puede que no me importase morir, pero si segui con vida esperaba porlo menos fuese una vida calmada, y un vampiro arruinaria mi idea de una vida normal aunque yo misma fuese una de ellos.

Bufé cuando se negó a ir a la mansion, ya que tenia demasiado espacio ahoara que mi familia se hallaba dispersa por ahi en sus cosas. Me sentia bastante sola, pero no le dije nada porque ultimamente habia recibido las visitas de Chelsea y Jane y no queria problemas.... no más. Noté como jugaba, imitando a una pequeña humana que se divertia inocentemente y un nudo se formó en mi garganta... ¿Por cuantas cosas a pasado esta niña hasta este dia? tenia ganas de estrecharla contra mi pecho, pero dudé porque mi contacto caliente podia incomodarla. Tomé aire y me fui hacia lo profundo, para poder tomarme un tiempo y obsevar las maravillas que las olas ocultaban. En el fondo, unas rocas blancas brillaban cegadoras con la luz que llegaba del sol, eran bellisimas... dejé inundar mi mente con esas imagenes esquisitas, aprovechando lo que quedaba de aire en mis pulmones. Queria olvidar mis problemas, las luchas y todo.... queria ayudar a esa niña y sonreirle sinceramente.. ¿Como se extingue el dolor?

No recibi respuesta despues de mi comentario, me incomodo un poco, pero no me importo, observe como se sumergia hacia unas hermosas rocas blancas y disfrutaba las bellisimas imagenes, yo tambien disfrutaba, su piel se vei radiante con el reflejo de rayos de sol combinados con el bellos color transaparente pero a la vez azul del mar, espere a su salida, su aire se habia terminado asi que si queria intentarlo de nuevo saldria por aire y aproveche el momento para hablar.-Perdon si no puedo aceptar la invitación, pero creo que no me llevaria muy bien con tu familia, por lo que se debes ser hija de una humana y un vampiro, y a decir verdad yo no soy buena con los vampiros-Le dije, no espere respuesta y me sumergi en el bello oceano, observaba la orilla y las islas lejanas en el ocaso, no dejaba de dar vueltas al asunto, tal vez si seria buena idea, pero tenia una casa ya, aunque era tan sombrio y vacio, ademas de que nisiquiera era una casa ya que era mas bien un pequeño departamento, despues de todo cuanto espacio podria ocupar con ese aspecto infantil, mi complexion no ocupaba mucho espacio a si que no nesesitaba tanto.

El aire se esfumó de pronto, como una brisa en que choca contra uan roca, un golpe seco y sin aviso previo. Nadé rapidamente a la superficie, donde tomé un gran sorbo de aire. Apensas sentí el agua descender por mi rostro MIku me hablo, con firmeza y conviccion, ya que seguramente estba esperando que lo haga para justificar su rechazo. La miré extrañada cuando mencioné su.. "desagrado" hacia los vampiros, ya que ella era una, ¿Como podias odiar a los de tu propia especie? Ignoré esa pregunta, ya qu eno debia resultarme extraño... debia dejar de pensar como mi familia, porque que ellos no odiara su existencia ni a los suyos no significaban que otros con transformaciones forzosas les guata ser lo que eran. En ese momento la niña se ocultó en el agua, y su piel deslumbrante la convertia en una joya blanca reslatando sobre el azul claro del agua, como una perla. Esta vez no bajé, ya que debia cuidar que nadie se acerque al lugar, por lo que dejé que ella investigara el mar y yo me alejñe un poco donde el agua me llegaba al pecho podia estar parada. No sabia que pensar o decir con esa niña, si dejarla sola o cuidarla.. ¿Que seria mas peligroso? ¿Que era lo mas conveniente?

Observe como nuevamente Renesmee no contestaba nada a mis palabras, pero no le tome mucha importancia, uno tiene derecho a reservar sus pensamientos, de pronto comenzo a alejarse a guas poco profundas, yo igualmente comenze a alejarme pero mar adentro para nadar a mayor profundidad, tal era mi distancia que entre a la zona de peces, era tan hermoso todo, deseaba tener una camara para poder capturar esos bellos momentos, aunque aun en mi mente daba vueltas el querer saber la razón de que Renesmee no me respondiese y que por el contrario se alejase de mi, tal vez habia cometido alguna indiscreción en mis palabras, pero si yo podia respetar su forma de pensar esperaba ella respetaba la mia, despues de todo mis razones tendria yo para odiar a mi propia especie y ella para que le agradecen, si es que le agradaban, aun asi era incomodo que me expresaba y ella no solo no me respondiese, si no que se alejara, mas que tomarlo como insulto, me hacia pensar que talvez no valia la pena nisiquiera que nos hubiesemos conocido.

Esperé unos cuantos minutos hasta que la niña volvio a salir del agua, cortando la planicie de la capa azul para tomar aire. Nuestras miradas se cruzaron durante unos cuantos segundos, y en los suyos percibí un sentimiento de.. ¿tristeza? No podia identificarlo bien, ademas de que no concordaba para nada con nuestra platica. Le sonreí, intentando animarla, aunque no sabia porque su rostro tenia ahora un toque decepcionante. Le hice gesto con mi mano llamandola, aunque ella me habia dejado claro que no queria tener ningun lazo con nadie, habia algo en mi que me impedia que no hicera nada cuando en su rostro de angel su mueca era de dolor.
-¡Miku, si te cansas de ver solo animales ven aqui y te cuento algunas cosas para visitar de las cercanias! -ella escucharia, y cualquier humano cerca, pero no habia nada sospechoso en mis palabras asi que decidí volver a materme bajo del agua para mojar mi cabello que se secaba rapidamente por el calor del sol.

Al salir de nuevo a la superficie y escuchar el grito de Renesmee, pense 2 veces si debia o no de hacer caso, en cierta forma me sentia insegura de lo que debia hacer, aunque despues de unos momentos decidi arriesgarme y nadando me hacerque lentamente disfrutando aun del paisaje, al ver un poco mas de cerca a Renesmee ella mojaba sus divinos cabellos con las gracia y melodia como si cada uno de sus cabellos se llenaran de un hermoso brillo que hacia juego con sus bellos ojos color chocolate al igual que el hermoso color de su piel y el bellisimo bañador que portaba su perfecta figura solo comparable con la de una divina princesa, pero aun pese a que su divino y docil aspecto no me inculcaban ningun negativo sentimiento seguia dudando si era correcto el tenerle confianza, ella seguia siendo una hibrida, ademas de que me llamaba demasiado la atencion y eso era malo si ponia que se crearia un lazo, no podia permitirlo aunque no paraba de nadar hacia ella para hablar ¿Porque?¿Acaso realmente ella me agradaba?

Luego de peinarme, me erguí para poder ver mas claramente el rostro de Miku acercandose, el cual era dubitativo y algo distante. Nadaba hacia mi, pero sentia que su mente estaba en otro lado, por lo que comecé a preocuparme de que sus ideas sean claras. Ella me habia dicho de su disgusto hacia los vampiros, pero ¿era esa la causa por la que se dividia en cuerpo y mente? Sonrei, realmente dudando que debia hacer en una situacion asi... en is años acmpañando a mi abuelo habia conocido varios vampiros que se odiaban a si mismo, a lo que eran y a su mundo... pero esta niña era diferente, era sumamente fragil e inestable, y debia tener cuidado como acercarme a ella y obtener su confianza.
-Se que lo sientes... y se que no me conoces...-avancé hacia ella enun par de pasos y la tomé de la mano,obligando a que se parara- pero me gustaria que me des una oportunidad, y a vos..